El gobierno de Nicolás Maduro ha declarado que el país está enfrentando «un golpe de estado». Esta noticia llega en un momento de incertidumbre y desespero por parte del régimen, donde las elecciones presidenciales recientes han dejado al descubierto lo que podría ser el mayor fraude electoral en la historia.
La Declaración de Maduro
En un mensaje transmitido a todo el país, Maduro denunció que Venezuela está siendo atacada por un intento de golpe de estado, impulsado por sectores opositores con el apoyo de
«gobiernos extranjeros y poderes económicos internacionales».
Según él, estos actores buscan desestabilizar su gobierno y desconocer la voluntad popular expresada en las elecciones recientes, donde el Consejo Nacional Electoral (CNE) lo proclamó ganador con el 51.20% de los votos. Me suena tan familiar este discurso; es la misma estrategia que usa el régimen cubano para encarcelar a los presos políticos en la isla y quedarse con total impunidad ante las miradas internacionales.
La oposición venezolana y la comunidad internacional han cuestionado fuertemente estos resultados. Líderes opositores, como María Corina Machado, aseguran que el verdadero ganador es Edmundo González Urrutia, candidato de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), quien, según sus datos, obtuvo el 70% de los votos.
La Comunidad Internacional
Países como Argentina, Chile, Costa Rica, Perú, Panamá, República Dominicana y Uruguay han pedido una revisión exhaustiva de los resultados electorales y han solicitado la intervención de la Organización de Estados Americanos (OEA). La OEA ha convocado una reunión extraordinaria este miércoles para abordar esta crisis electoral y buscar soluciones.
La Voz de la Oposición
Mientras tanto, la oposición venezolana no ha dejado de movilizarse. Miles de venezolanos han salido a las calles para protestar, denunciando fraude electoral y exigiendo la salida de Maduro. Las manifestaciones han sido reprimidas en varias ocasiones por las fuerzas de seguridad, dejando a civiles heridos y algunos fallecidos, reflejando la represión del actual gobierno, cuando sus ciudadanos solo salen a exigir sus derechos.
La intervención de organismos internacionales como la OEA será clave en los próximos días para mediar en la crisis y buscar una salida que garantice la estabilidad y el respeto a los derechos humanos en Venezuela.